Pese a que el inicio está previsto para octubre, el Ayuntamiento de la capital sigue sin detallar los accesos alternativos que deberán utilizar cada día miles de vecinos de localidades como Boadilla del Monte, Pozuelo de Alarcón, Alcorcón, Móstoles, Villaviciosa de Odón, Navalcarnero, Arroyomolinos, etc.
Las obras del Paseo Verde del Suroeste comienzan en octubre (se desconoce fecha concreta) para dar inicio al soterramiento de la A-5 y durarán 25 meses. El Consistorio, que ayer aprobó la Operación Campamento para la construcción de 10.700 viviendas en una zona que coincide en gran parte con esos trabajos, sigue sin concretar cómo será el acceso y la salida a Madrid, tanto para los vehículos privados, como los del transporte público (autobuses interurbanos y taxis o VTC); por ella transitan cada día 80.000 vehículos.
Fuentes del Ayuntamiento indicaron en abril a Boadilladigital que el proyecto del Paseo Verde del Suroeste «contempla los desvíos necesarios para la ejecución de la obra y la minimización del impacto en la movilidad tanto a los residentes, como a los vecinos de otros municipios» y «hasta que no se adjudique la obra no se conocerán», aunque «dependerán de las propuestas de las empresas adjudicatarias» . La adjudicación tuvo lugar el 26 de agosto a Ferrovial.
Ayer contaron que «el Ayuntamiento de Madrid informará sobre los desvíos según
se vayan a producir las ocupaciones de los diferentes tramos» y que «se informará con el tiempo pertinente para que la ciudadanía tenga conocimiento del tema».
Cartas a vecinos y código QR
En la mañana de este miércoles el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha anunciado que están «trabajando también con el Consorcio General de Transporte para mejorar las líneas de Metro del entorno y mejorar también las líneas de EMT y los autobuses interurbanos»y que «a lo largo de las próximas semanas» establecerán «un sistema, un plan de movilidad de refuerzo del transporte público para que se puedan utilizar y mover las personas de ese entorno con total normalidad».
También tienen previsto enviar 10.000 cartas a vecinos del entorno de la A-5 en las que incluyen un código QR que permite actualizar los cortes de tráfico que se puedan ir produciendo. En este aspecto, van a intentar dar «la máxima difusión» para que llegue no sólo a los madrileños que viven en esa zona, sino a los que utilicen esta vía o aquellos municipios afectados también por los cortes en la A-5. «Daremos traslado de esa carta a todos los alcaldes de la zona para que puedan informar también a todos sus vecinos».
Y es que también mostraron preocupación los alcaldes de municipios colindantes, quienes el día 23 de julio mantuvieron una reunión con el gerente del Consorcio Regional de Transportes de Madrid, Pablo Pablo Rodríguez Sardinero.
Proyecto
El Paseo Verde del Suroeste busca eliminar la división que provoca desde 1968 la A-5 en el distrito de Latina, en concreto entre los barrios de Lucero, Aluche y Las Águilas y los de Campamento y Casa de Campo.
Permitirá dar continuidad al bulevar peatonalizado de la avenida de Portugal hasta la del Padre Piquer en una actuación que comprende un total de 3,8 kilómetros. Se hará en lotes «para minimizar el plazo de ejecución global», consideran: desde Padre Piquer a Batán y desde ahí a la avenida de Portugal, y el tercero el relativo a la urbanización en superficie sobre el túnel.
Pese a que inicialmente no estaba previsto por las administraciones implicadas, finalmente el Paseo Verde Suroeste sí se extenderá hasta la Avda. de la Aviación. No obstante, ese tramo, que comenzaría en Padre Piquer, todavía carece de proyecto, ya que el Ayuntamiento de Madrid y el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana deberán suscribir el nuevo convenio para ejecutarlo, con la aportación de un máximo de 150 millones de euros de la Administración General del Estado.
El nuevo túnel contará con una distribución de tres carriles por sentido en dos vanos. Los más próximos a la mediana en ambas calzadas se diseñan para su uso como bus-VAO, dotados con una señalización variable que permitirá regular su utilización en función de las necesidades del tráfico en cada momento. «La flexibilidad de este sistema permitirá la optimización de la infraestructura, adaptándose a la demanda de transporte de manera variable», indican desde el Ayto.
ARC
