Un 14,2 por ciento, según datos del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género.
El número de mujeres víctimas de la violencia de género y el de denuncias presentadas durante 2020 en la comunidad de Madrid disminuyeron un 12,4 % y un 14,2 respectivamente, con relación a 2019. También fue menor el de órdenes de protección incoadas (un 12,8 % menos).
Este importante descenso en los principales indicadores de la violencia de género es consecuencia directa de la crisis sanitaria y, especialmente, de los meses de confinamiento, durante los que se apreciaron las mayores variaciones pese a que los juzgados especializados en violencia sobre la mujer de la región siguieron funcionando al considerarse esencial su actividad.
El estudio pone de manifiesto también cómo, pese a la disminución de las cifras absolutas, los indicadores de la violencia machista en Madrid se han mantenido en niveles cercanos a los de 2019: así, casi 8 de cada diez denuncias las presentaron las víctimas (un 78,97%, en 2020 y el 72,6 %, en 2019); los órganos judiciales acordaron 52,5 % de las órdenes de protección solicitadas (el 55,76 % en 2019) y el 74,1 por % de las sentencias condenaron al agresor (en 2019 fueron condenatorias el 74,4 % de las sentencias).
la tasa de mujeres víctimas de violencia de género por cada 10.000 mujeres fue de 61,8, más cerca de la media nacional, que fue de 60,2
Durante el año 2020, los juzgados madrileños recibieron un total de 22.463 denuncias por violencia de género, un 14,2 % menos que en el año anterior, en el que se presentaron 26.166 denuncias. Las mujeres víctimas de violencia machista fueron 21.865 (decremento del 12,4 %), de las que 9.502 eran extranjeras, lo que supone un 43,5% del total.
En cuanto a la tasa de mujeres víctimas de violencia de género por cada 10.000 mujeres, Madrid, con 61,8, se sitúa una vez más cerca de la media nacional, que fue de 60,2. Las Comunidades de Baleares, con una ratio de 93,8; Comunidad Valenciana, con 81,5; Canarias, con 80,5; Murcia, con 79,5; Andalucía, con 67,9 figuran a la cabeza de este indicador. Las tasas más bajas se dieron en Castilla y León, con 39; Aragón, con 40,2, y Extremadura, con 41,4.
Órdenes de protección
Durante 2020 se solicitaron en los órganos judiciales de la región 5.119 órdenes de protección, un 12,8 % menos que en 2019. De ellas, se adoptaron 2.686 (3.192, en 2019), lo que supone un 52,5% del total; 2.408 fueron denegadas (2.645, en 2019), y 25 inadmitidas (36, en 2019).
Los juzgados de la comunidad acordaron también, derivadas de las órdenes de protección y otras medidas cautelares, un total de 6.038 medidas judiciales penales de protección de las víctimas (mujeres y menores).
En 2020, los juzgados de violencia sobre la mujer de Madrid dictaron 2.373 órdenes de alejamiento y 2.386 medidas de prohibición de comunicación. Si bien el número de medidas penales dictadas disminuyó un 13,8 % con respecto a 2019, el porcentaje de órdenes de alejamiento y prohibición de las comunicaciones sobre el total de las medidas acordadas se mantuvo estable.
El 74,1% de las sentencias fueron condenatorias
Asimismo, se dictaron 1.984 medidas cautelares civiles (un 6,3 % menos que en 2019), cuya finalidad es la protección de la mujer y de los menores en tanto se resuelve el proceso penal. Las más frecuentes fueron las relacionadas con la prestación de alimentos (658 del total de adoptadas) y con la atribución de la vivienda (641) cifras que, de nuevo, se mantienen estables en relación con los de 2019.
En 2020, el porcentaje de sentencias condenatorias dictadas por los órganos judiciales de la región (juzgados de violencia sobre la mujer, juzgados de lo penal y audiencias provinciales) en procesos relativos a violencia de género se situó muy próximo al del año anterior con 74,1 % del total. En 2019 fueron el 74,4 %.
Cuarto trimestre de 2020
Los datos hechos públicos hoy por el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género reflejan cómo, durante el cuarto trimestre de 2020, los principales indicadores mantuvieron la tendencia a la baja de los dos anteriores trimestres.
El número de denuncias registradas, 5.715, disminuyó un 14,8 % con respecto a las presentadas entre el 1 de octubre y el 31 de diciembre de 2019 (6.707).
Las mujeres víctimas de la violencia machista fueron en el último trimestre del año 5.485, un 16,1 % menos que en el mismo periodo de 2019. Un 42,6 %, de las víctimas eran extranjeras, frente al 43,3 % del año anterior.
El número de mujeres que se acogieron a la dispensa del deber legal de prestar declaración fue de 599, un 39,3 % más bajo que en el cuarto trimestre de 2019, en el que lo hicieron 987. Esta cifra representa que once de cada 100 mujeres renunció a declarar contra su agresor.
Los juzgados de violencia sobre la mujer de Madrid incoaron en el transcurso del cuarto trimestre de 2020 un total de 1.281 órdenes de protección, un 9,5 % menos que en el mismo periodo del año anterior, en el que se registraron 1.415. De las 1.281, 644 órdenes fueron adoptadas y 637, denegadas. En cualquier caso, ninguna de las solicitudes fue inadmitida.
En cuanto a las sentencias dictadas, 344 en total, el porcentaje de resoluciones condenatorias se situó en el 74,4 %, frente al 73,9% del cuarto trimestre de 2019. En concreto, 256 resoluciones fueron de carácter condenatorio y 88 contenían un fallo de absolución.
«la denuncia es la llave que permite poner en marcha los mecanismos de protección de la víctima»
La presidenta del Observatorio, Ángeles Carmona, ha recalcado que estas cifras del pasado año «permiten visualizar el importante impacto que la crisis sanitaria ha tenido para las víctimas de la violencia de género, no solo durante los meses del confinamiento más duro, sino también en los meses siguientes, en los que ha seguido habiendo medidas anti-COVID que han restringido el movimiento de las personas».
En su opinión, «los principales indicadores -número de denuncias presentadas y número de víctimas- disminuyeron en año pasado cerca de un diez por ciento. No es un dato que pueda llevarnos al optimismo, pues no equivale a un descenso real en el número de casos de violencia machista, sino que pone de manifiesto las dificultades añadidas que las víctimas han tenido para denunciar a sus agresores. Por encontrarse en casa bajo el control constante de sus agresores, por dudas sobre si podían o no salir, por el miedo a que les pasara algo a sus hijos e hijas, más de 17.000 mujeres dejaron de denunciar el pasado año».
También ha recalcado que «la denuncia es la llave que permite poner en marcha los mecanismos de protección de la víctima; y también la única manera de la que disponemos para que los delitos de violencia sobre la mujer no queden impunes». Por eso es «importante la concienciación del entorno de la víctima y, por eso, desde el Observatorio reiteramos el llamamiento para que familias, allegados, vecinos o testigos accidentales de un hecho de estas características lo pongan en conocimiento de las autoridades».