Endosaron un parcial de 30-4 en el primer cuarto, lo que dejó visto para sentencia el partido disputado el pasado sábado en la localidad castellanomanchega.
Durísimo correctivo el que recibió un Jofemesa ADC Boadilla que fue como un muñeco en la fauces de un tigre. Los de Nacho Frade no aparecieron hasta el segundo cuarto, ya que sólo anotaron cuatro puntos en los primeros 10 minutos, ante un Guadalajara Basket que les endosó 30. Así es imposible, y menos con unos porcentajes de tiro tan malos.
Con esa losa en el marcador pero, sobre todo, anímica, los de Boadilla del Monte nada tuvieron que hacer el resto del partido salvo tratar de cambiar una imagen que recordó a la del partido de ida en la que perdieron por un abultado 79-98. En el segundo cuarto, otro parcial, 28-12, para llegar al descanso con un tremendo y sonrojante 58-16.
Nacho Frade no dio con la tecla para que sus pupilos compitiesen algo, aunque en el tercer periodo sí mejoraron levemente y casi llegaron a los 20 puntos ante un conjunto alcarreño que siguió a lo suyo y les endosó otros 30.
La debacle se culminó en el último cuarto con un conjunto visitante que metió sólo 11 puntos y un Guadalajara Basket que se fue de nuevo hasta casi los 30, concretamente 26 tantos.
En el festín anotador de los locales hasta seis jugadores encestaron 10 o más, lo que demostró el poder del colectivo, que a la larga fue el MVP del encuentro, mientras que en los de Boadilla del Monte, echaron en falta, y de qué manera, a su mejor jugador, Raúl Pérez, y todos hicieron valoración negativa, ¡un desastre!
Con esta derrota Jofemesa ADC Boadilla sigue último del grupo B de la Liga EBA, con un sólo partido ganado en 20 jornadas y es deportivamente casi equipo descendido.