Según los datos del Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior correspondientes al cuarto trimestre del año.
Sustracción de vehículos, lidera la tipología de delitos que más se han incrementado, seguido de estafas informáticas y robos con fuerza en domicilios.
Boadilla del Monte registró un total de 2.265 infracciones penales entre enero y diciembre de 2022 frente a las 1.742 del mismo periodo de 2021, lo que representa un aumento del 30 por ciento. Un incremento del 3,8% en comparación al tercer trimestre, como ya informó Boadilladigital.
Entre la tipología que más han subido, en primer lugar se sitúa la ‘Sustracción de vehículos’ (de 5 en 2021 a 11 este año, un 120%); seguido de ‘Estafas informáticas’ (de 263 a 457, un 73,8%); ‘Robos con fuerza en domicilios’ (92 frente a 143 este año, un 55,4%); ‘Agresión sexual con penetración’ (de 2 a 3, un 50%); ‘Robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones’ (112 en 2021 frente a 150 en 2022, un 33,9%); ‘Delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria’ (de 13 a 17, un 30,8%); ‘Robos con violencia e intimidación’ (de 20 a 26, un 30%).
En el lado opuesto, han descendido los ‘Homicidios dolosos y asesinatos en grado tentativa’ (de 1 en 2021 a 0 este año, -100%); ‘Tráfico de drogas’ (de 8 a 3, un -62,5%); y ‘Homicidios dolosos y asesinatos consumados’ y ‘Secuestros’ (de 0 a 0, un 0%).
Comunidad de Madrid
En el conjunto de la región la criminalidad aumentó entre enero y diciembre de 2022 un 16,5%, según el balance. Los delitos de cibercriminalidad han ascendido un 21,5% en comparación con el mismo periodo hace dos años.
En relación al porcentaje de aumento de las infracciones penales, Boadilla del Monte se sitúa como la localidad de más de 20.000 habitantes de la Comunidad de Madrid donde más se han incrementado. Le siguen Aranjuez (29,8%); Navalcarnero (24,9%); Arganda del Rey (22,4%); y Collado Villalba y Villanueva de la Cañada (21,9%).
Matizaciones
Este Balance de Criminalidad, correspondiente al cuarto trimestre del año 2022, recoge la evolución de la misma en España registrada durante todo el año por las Fuerzas y
Cuerpos de Seguridad del Estado (Policía Nacional y Guardia Civil), los Cuerpos de Policía dependientes de las Comunidades Autónomas y también por aquellos Cuerpos de Policía Local que facilitan datos a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Como se apuntó en la publicación de balances anteriores, durante los años 2020 y 2021 se produjo un importante descenso de las cifras de criminalidad en España, como
consecuencia de las condiciones derivadas de la pandemia causada por la COVID-19.
Por otro lado, y como hecho asociado a la penetración y el uso de internet en España
(especialmente a las crecientes formas de comercio y compras on line) que se viene
observando desde hace ya algunos años, y de manera muy significativa desde 2016, se ha producido un incremento de las modalidades de criminalidad agrupadas bajo el concepto de cibercriminalidad, y muy particularmente un fuerte incremento de las estafas cometidas por medios informáticos.