En las estaciones de Cuatro Caminos y Reyes Católicos, con una inversión de casi 700.000 euros.
De los 22 tornos, 13 están en la de Cuatro Caminos y nueve en Reyes Católicos. En la primera, cinco se encuentran en el acceso por la calle Maudes y ocho en el vestíbulo principal, siendo cuatro de ellos adaptados a personas con movilidad reducida.
Se suman a los 17 ya ubicados en Gran Vía como parte de un proyecto que se extenderá, en una primera fase, hasta 2025, y que supone la colocación de estos dispositivos en 32 infraestructuras de la red. Para ellos el Gobierno regional invertirá 16 millones de euros, incluyendo el montaje de 387 accesos inteligentes en Manuel de Falla, Alonso de Mendoza, Juan de la Cierva, Getafe Central, Casa del Reloj, Hospital Severo Ochoa, Menéndez Pelayo y Tres Olivos. También, en Begoña, Avenida de América, Atocha, Ventas, Duque de Pastrana, Santiago Bernabéu y Diego de León, entre otras.
Después, en una segunda fase, que finalizará en 2029, se prevé llegar a otras 154 estaciones, lo que representa la mitad de la red.
Estos aparatos ocupan menos espacio, agilizan los accesos y disponen de un diseño más intuitivo y una pantalla que informa al viajero sobre la admisión del título de transporte empleando gráficos y texto. Además, introducen avisos acústicos y de iluminación led en las puertas y en el suelo, para informar sobre el resultado de la validación.
Asimismo, incorporan «la tecnología más moderna disponible en la actualidad» para estos sistemas, que, aunque invisible de cara al usuario, es muy útil en la gestión y el mantenimiento de los equipos, han indicado desde el Ejecutivo regional. Otra de las novedades es que, estos modelos, permitirán, en un futuro próximo, el pago del billete con tarjeta bancaria.
Este proyecto se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea-Next Generation EU.
En línea con la modernización de elementos en la red de Metro, el pasado mes de diciembre anunció que los trenes contarán con avisadores acústicos y luminosos en las puertas, un sistema para el que va a invertir más de seis millones de euros. Se trata de un prototipo que ha sido consensuado con el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI).
