Estará ubicada en el casco urbano, tal y como han indicado fuentes del Consistorio de Boadilla del Monte a Boadilladigital.
Antes de que acabe 2023, en diciembre, el Ayuntamiento activará la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en el casco urbano del municipio, algo que se enmarca dentro del Plan de Mejora de la Movilidad Urbana (PMMU) que puso en marcha en septiembre de 2022.
Actualmente, está preparando la ordenanza que va a regularla y están ejecutando el contrato cuyo expediente se puede consultar en la Plataforma de Contratación del Sector Público a través de este enlace.
El objetivo del mismo es el suministro del sistema de gestión y control de la ZBE, con valor estimado que asciende a 624.216 euros, financiados íntegramente con el Fondo Europeo de Desarrollo Regional, programa Next Generation UE.
Pese a que la intención del Ayuntamiento era activarla en 2022, finalmente lo retrasó a 2023, tal y como contó Boadilladigital en esta noticia.
El contrato se adjudicó el pasado 27 de abril a la empresa Etralux S.A.-Omnivisión Seguridad S.L para una duración de 31 meses, prorrogable hasta los 55 y se formalizó el 2 de junio.
Obligatoriedad
La implantación de ZBE es obligatoria en España para localidades de más de 50.000 habitantes (y los de más de 20.000 que superen determinados niveles de contaminación) para cumplir con los objetivos marcados por la Unión Europea y en cumplimiento de la Ley de Cambio Climático y Transición Energética aprobada en 2021.
Se trata de áreas delimitadas por cada ayuntamiento donde aplicará restricciones de acceso, circulación y estacionamiento de vehículos contaminantes para es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mejorar la calidad del aire.
Su puesta en marcha en toda España afectará sobre todo a unos cuatro millones de vehículos que no tienen ningún distintivo medioambiental, según empresas del sector de automoción.