Después del parón de dos años, el Ayuntamiento de Boadilla ha iniciado una nueva campaña arqueológica en este yacimiento visigodo.
El objetivo del equipo de arqueólogos es el de finalizar los trabajos de hace dos años en este yacimiento que han calificado de «singular» y «emblemático» de la Comunidad de Madrid en el que creen que pueden encontrar algunas nuevas tumbas.
Igualmente, ampliarán la excavación en la zona de la escalera que apareció hace varios años y que conduce a lo que podría ser una cripta o un espacio ubicado debajo del edificio en el que se almacenaría el grano, el aceite y otros productos para uso del asentamiento. Una tomografía realizada cuando se descubrió indicó la posible presencia subterránea de cavidades, galerías o cámaras.
El Ayuntamiento tiene previsto construir en el cerro de San Babilés una ermita que se ubicará a escasos metros de donde se encontraba la original y tendrá su misma orientación y planta. Este nuevo edificio religioso seguirá los modelos de la época, pero incorporará soluciones propias de la arquitectura del siglo XXI.
Con todos estos trabajos iniciados con sucesivas campañas desde 2014, está previsto que en 2022 el enclave arqueológico del cerro de San Babiles, ya declarado Bien de Interés Cultural, esté plenamente acondicionado para su visita.
El yacimiento está compuesto fundamentalmente por un edificio religioso altomedival, cuyo origen vincula la tradición cristiana con el martirio del santo en el año 715 con la invasión musulmana.