Pese a que su moción fue rechazada en el Pleno del Ayuntamiento del Monte del día 25 de octubre.
El partido socialista propuso en la sesión plenaria la instalación de uno o dos árboles urbanos sostenibles, también llamados árboles líquidos, y han han explicado ayer en una nota que es «un excelente ejemplo de la economía circular, ya que se trata de una solución peculiar que utiliza las propiedades depurativas de las microalgas, una innovadora tecnología que busca combinar las funciones de los árboles naturales con soluciones tecnológicas avanzadas para combatir el cambio climático».
Recalcan que «ha demostrado ser eficaz para combatir la presencia de gases de efecto invernadero, como los óxidos de nitrógeno (NOx) y el dióxido de carbono (CO2), ambos con efectos negativos sobre la salud humana y el medio ambiente».
Explican que en el interior de la estructura del árbol líquido las microalgas son las encargadas de captar el aire contaminado y gases perjudiciales de la atmósfera para transformarlos en nutrientes que les permiten sobrevivir y así liberar oxígeno. Este proceso produce «biomasa revalorizada que puede ser cosechada al 50% del cultivo cada 15/30 días, momento en el que se añade agua y sales minerales para que siga creciendo». Se trata de un «excelente biofertilizante para aumentar la producción de los cultivos agrícolas, plantas, árboles nativos, fabricación de bioplásticos, o estructura de hormigones, etc.»
Según los cálculos del PSOE, uno de estos ejemplares, equivaldría a retirar 2,7 toneladas de CO2 al año y tendría una equivalencia a 40-50 árboles, y uno de 0,6 m3 podría retirar 5,4 y sería equivalente a 80-100.
Recuerdan que se pueden instalar en cualquier espacio público urbano y se han implementado en Madrid (Plaza de España), y en otras ciudades como Barcelona, Barakaldo, Belgrado o Berlín, y al igual que en otros municipios como Pozuelo de Alarcón, que instaló el pasado mes de marzo un árbol líquido gracias al convenio con Metro Ligero Madrid Oeste y «puede ser a coste cero 0».