El Sistema Nacional de Salud financia por primera vez la vareniclina y el bupropión. Se pueden beneficiar alrededor de 83.800 personas.
La medida se acordó en las reuniones de la Comisión Interministerial de Precios, en la que participan Gobierno y CCAA, celebradas en septiembre y octubre. Los profesionales del Sistema Nacional de Salud (SNS) contarán así con una herramienta más para la deshabituación tabáquica y reducir las 58.000 muertes anuales asociadas al tabaco que se producen en nuestro país.
En el documento que elaboraron se encuentra la inclusión del abordaje del tabaquismo en la cartera de servicios de Atención Primaria, iniciativa acorde con la evidencia científica y coste-efectiva.
La prescripción del tratamiento se producirá bajo receta electrónica en pacientes que estén incluidos en el programa de apoyo individual y/o grupal establecido por la comunidad autónoma o las mutualidades y además cumplan los criterios establecidos: tener motivación expresa de dejar de fumar constatable con al menos un intento en el último año, fumar diez cigarrillos o más al día y tener un alto nivel de dependencia, calificado por el test de Fagerström ≥ 7.
Cada prescripción se realizará por un envase, lo que equivale a un mes de tratamiento. Tras ello, el médico, en el marco del seguimiento del programa de deshabituación tabáquica, deberá valorar la evolución de la efectividad con carácter previo a la emisión de la siguiente receta.
El tratamiento completo tiene una duración entre nueve y 12 semanas y el SNS financiará un intento anual por paciente para dejar de fumar. La previsión es que tenga un impacto presupuestario estimado de 7,9 millones de euros en el primer año.
El coste del tratamiento día, precio con IVA incluido, será de, aproximadamente, 3,55 euros por persona en el caso de la vareniclina y de 1,03 euros/día en el caso de bupropion. Si es una persona con una aportación farmacéutica del 40%, abonaría 1,42 euros/día en el primer caso y 0,41 euros en el segundo. Esto supone que en el primer medicamento, se producirá, por tanto, una disminución del 36% en el coste y en el segundo del 72%.
La ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social en funciones, María Luisa Carcedo, ha destacado que éste es un paso importante en el abordaje del tabaquismo: “El éxito en la cesación tabáquica en personas que lo hacen sin ayuda es del 5% frente al 30-40% en aquellas que siguen un tratamiento farmacológico específico y cuentan con apoyo psicológico”. No obstante, hace hincapié en que “sólo un abordaje integral y con medidas multisectoriales de carácter legislativo, sanitario y educativo harán posible la prevención y control del tabaquismo”.
El tabaquismo constituye el principal problema de salud pública prevenible en los países desarrollados; es un factor determinante de numerosas patologías y la primera causa de morbimortalidad evitable.