
Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un grupo criminal especializado en estafas mediante mensajes de texto y llamadas fraudulentas.
Localizadas 43 víctimas en toda España, por hechos cometidos durante los primeros meses de 2024, a quienes causaron un perjuicio económico de más de 120.000 euros.
La investigación comenzó a finales del 2023, tras recibir diferentes denuncias de personas que aseguraban haber sufrido una estafa a través de su banca online mediante el mismo procedimiento. En primer lugar, las víctimas recibían en sus teléfonos móviles un SMS simulando ser su entidad bancaria informándoles que se había identificado una operación fraudulenta y para poder bloquearla debían acceder al enlace adjunto al mensaje (técnica conocida como ‘smishing’). Al acceder, este les redirigía a una página web que imitaba la imagen corporativa de la entidad suplantada, en donde se les pedía que introdujeran sus credenciales de acceso a la banca online (usuario y contraseña).
De este modo, engañados, al pensar en todo momento que estaban interactuando con la aplicación oficial de su banco, aportaban sus credenciales, con las que accedían a sus correspondientes servicios de banca telemática.
Una vez los ciberdelincuentes ordenaban los pagos mediante transferencias bancarias o vía aplicación de pago inmediato, necesitaban que la víctima les facilitase también los códigos de doble verificación que los bancos enviaban vía SMS a sus clientes. Por ello, a los pocos minutos de haber proporcionado sus claves, recibían una llamada telefónica de personas que se identificaban como empleados de su entidad (conocida como ‘vishing’). De este modo, lograban que las víctimas se los entregaran, argumentando que eran necesarios para bloquear la supuesta operación fraudulenta.
Organización
Avanzada la investigación, se logró la identificación de los tres principales responsables de la organización, autores intelectuales y materiales de las estafas. Por tales hechos, el pasado día 28 de enero se efectuaron tres entradas y registros en los que se intervinieron numerosos dispositivos electrónicos, ropa, artículos de lujo, 7.000 euros y un dispositivo lector/clonador de bandas magnéticas. En el dispositivo policial llevado a cabo simultáneamente en Madrid y Barcelona, se logró la localización del resto de integrantes de este grupo organizado, pertenecientes a niveles inferiores del entramado criminal.
Unos eran los encargados de realizar las llamadas a las víctimas, otros de captar a las personas que abrían las cuentas bancarias para recibir el dinero estafado, y en último lugar de los denominados ‘mulas’, titulares de estas cuentas.
Como resultado del dispositivo, se procedió a la detención de 35 personas, entre los que se encuentran los cabecillas de la organización, como presuntos responsables de los delitos de pertenecía a grupo criminal, delito continuado de estafa y blanqueo de capitales. Tras los arrestos fueron puestos a disposición judicial.
En el ámbito bancario, esta operación se suma a otras relacionadas, como la que tuvo lugar el pasado noviembre desde Madrid, dirigida contra bancos, a través del uso de datáfonos e identidades falsas.