El Ayuntamiento de Boadilla del Monte celebró este domingo un acto en recuerdo de María Piedad García Revuelta en el que participaron familiares y amigos, miembros de la Corporación Municipal y representantes de Guardia Civil y Policía Local.
El acto tuvo lugar ante el monolito levantado en su honor en el parque de la localidad que lleva su nombre y comenzó con una oración y un minuto de silencio tras el que el alcalde, Antonio González Terol, y el hijo mayor de María Piedad depositaron un centro de flores al que siguieron numerosos ramos que colocaron otros familiares, amigos y vecinos.
En su intervención, el regidor reiteró el apoyo incondicional del Consistorio a la familia y pidió a la Guardia Civil que continúe buscándola y sigua cualquier pista que surja, tal y como ha hecho en todos estos años, petición a la que también se unió la madre de la desaparecida. Igualmente reclamó a las personas que puedan tener información sobre lo que ocurrió aquella noche que informen a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, un deber, dijo, «no solo legal sino también moral pues la información es crucial para seguir avanzando en la investigación, esclarecer qué ocurrió la noche del 11 de diciembre de 2010 y para que su familia recupere la tranquilidad y la normalidad perdida, si ello es posible».
María Piedad desapareció la noche del 11 de diciembre de 2010 tras abandonar la cena de Navidad de su empresa con su expareja que pocos días después falleció sin haber esclarecido lo que sucedió.
